En 1960 nacieron Bono, Diego Maradona y Will Wright. Wright destaca por haber diseñado una serie de videojuegos que invitan a experiencias siempre diferentes si las comparamos con la oferta estándar. Lejos de los shooters o las aventuras gráficas complejas, este artista del ocio electrónico estadounidense, logró que una de sus creaciones, The Sims, se convirtiera en el juego para PC más vendido de la historia. Lo original consisitía en que se creaba un personaje cuyo propósito no era ni salvar princesas ni acabar con una invasión alienígena: el objetivo era, simple y llanamente, vivir.
Pero antes de conseguir tal hazaña en una industria tan competitiva, Wright tuvo que luchar para que alguna plataforma le comprara la licencia de su primera creación, SimCity. La empresa Commodore rechazó en 1985 el proyecto, alegando que un videojuego en el que se construyen ciudades en el que no se gana ni se pierde no iba a interesar a nadie. Finalmente, en 1989, el juego salió al mercado y se convirtió en el más vendido del año.