"Yo tengo la impresión de que el documental frente a otros géneros tiene la virtud de su inmensa apertura. En el documental pueden caber muchísimas cosas que no caben en las películas llamadas de ficción, que vienen muy arropadas por la existencia de un guión, de un guión que significa una estructura muy cerrada. El documental, aparte de ser un género muy abierto, muy ambiguo, tiene la ventaja y la grandeza de que cabe todo: cabe la ficción, la reflexión, el ensayo, la demostración, la película militante... Cuando pobres cineastas se empeñan en hacer sus primeras armas con esa enorme proliferación de cortometrajes, de pequeñas historias de ficción, creo que se equivocan, se confunden y harían mucho mejor practicando a través del documental, que es un género que permite una enorme libertad. En unos momentos en que el cine está ahogado por los enormes presupuestos, por esa nutricidad del cada vez más (más dinero, producciones cada vez más mastodónticas), de ese deseo del cine español de competir con el cine americano y de manejar cada vez mayores presupuestos, tengo la impresión de que el regreso al documental (que no quiero calificar, porque lo considero un género incalificable y, por tanto, un género con muchas posibilidades), sería una mejor escuela y un mejor aprendizaje..."
[Entrevista realizada en el año 2000 por Daniel Gascó García]