miércoles, 17 de febrero de 2010
El verité es pegajoso
El problema del cine directo americano es que la mayoría de sus grandes exponentes sostuvieron la autenticidad de sus métodos de filmación y de los resultados finales que alcanzaban. Y en general, la copiosa discusión teórica de estos films ha buscado meramente desmantelar, descartar o rechazar esta pretensión de verdad mediante el rebusque de secuencias, de ediciones y de tomas que contradigan el mantra del cine directo. El Verité es un lugar pegajoso, que ha tenido éxito en demostrar dos cuestiones mutuamente excluyentes: que la ambición que guía al documental es la de encontrar un modo de reproducir la realidad sin desvíos o manipulaciones, y que esta persecución de una realidad no adulterada es inútil.
Stella Bruzzi, 2000